La bajante histórica del Río Paraná tiene un impacto enorme en lo ecológico y lo económico. En la provincia de Santa Fe son, de manera oficial, 1400 familias las que se abastecían del río para comerciar y subsistir, algo que no es posible actualmente.
Desde la Asociación Civil de Pescadores, Jesús Pérez sostuvo en Condenados al éxito que hay al menos 100 familias santafesinas que vivían de la pesca en la Setúbal y hoy no tienen más que un bolsón de comida. A su vez, Pérez comentó que aguardan que lleguen aportes para las familias cuando se apruebe la Emergencia Hídrica, que distribuirá 1000 millones de pesos.