“Desde hace tiempo se nota la caída en la actividad gastronómica. Vemos que es un laberinto sin salida para el sector. Hay una caída tremenda en el consumo y un aumento desmedido en el valor de los servicios”, comenta Alfredo Hediger, comerciante gastronómico.
“La caída en la actividad se pondera entre un 38 al 40%. Hoy no vemos un acompañamiento ni en los números macros tanto nacional, como provincial o municipal. Vemos un laberinto sin salida”, cuenta el entrevistado.
“Está bien que el gobierno ofrezca capacitaciones, pero los negocios están cerrando hoy. La factura del gas tiene un aumento del 320%, y el kilo de helado pasó de costar 8.600 a 10.000 pesos”, describe Hediger.
“Entre diciembre y abril la factura de la Empresa Provincial de la Energía de Santa Fe se multiplicó por 3. Estamos firmando convenios para poder afrontar las facturas mensuales en cuotas con los intereses correspondientes”, enfatiza el comerciante.