“Las personas mayores llegan con buenas condiciones de autovalidez, lo que es bueno. Es la primera vez en la historia del mundo en el que las personas viejas son mayoría en las sociedades del mundo. No hay tasa de reemplazo.”, sentencia María Julieta Oddone, licenciada en Sociología de la Universidad de Buenos Aires.
“Al caer la tasa de reemplazo, la población de adultos mayores termina transformándose en un problema para las sociedades; es un fenómeno que empieza a darse desde mediados del siglo pasado.”, describe la licenciada.
“La sociedad sigue planificando, generando programas como antaño, sin tener en cuenta que hay muchos viejos. Estamos asistiendo a sociedades en viejos que se hacen cargo de más viejos.”, subraya la entrevistada.
“La vejez no es una edad, es el producto de una historia biológica y de una historia biográfica. Varía según los ingresos económicos, las cargas de trabajo a lo largo de la vida, uno ve claras diferencias.”, expresa la invitada.
“Cuando abordamos el tema de cuidado, se construye desde una tarea femenina. En relación a la temática de vejez, la investigación nos muestra que son muchas las viejas que cuidan viejos, nietos o hijos.”, explica la socióloga.
“Una de las características del viejismo es no pensar las sociedades como sociedades, se ve a las personas mayores como carga, y no como algo integral. Debería cambiar la estructura social.”, enfatiza la Magister en Gerontología.
“Pensar a los viejos como una carga es un error, las familias no son iguales. Debe haber una planificación distinta en todos los sentidos.”, destaca Oddone.
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