En el marco del Día Mundial de la Salud Mental, este último 10 de Octubre referentes del espacio Evolución visitaron escuelas para reflexionar sobre qué sienten los menores que atravesaron la pandemia y que hoy transitan la pospandemia.
En Rock de Caro, la dirigente de Evolución Santa Fe, Carolina Piedrabuena aporta su perspectiva sobre la Educación y los efectos de la pandemia. El trabajo se realizó junto a la especialista Ana Collins, coordinadora del servicio local de Niñez. “Cómo volvieron los niños y niñas a los establecimientos educativos, cuáles son sus emociones, qué sienten en este proceso”, señala Piedrabuena.
A raíz de las charlas, consideran que las familias deben acompañar y para ello faltan herramientas, no sólo pedagógicas.
El Día Mundial de la Salud Mental (DMH), que se celebra cada 10 de octubre, es promovido por la Federación Mundial de la Salud Mental y cuenta con el respaldo de la Organización Mundial de la Salud (OMS). El evento representa un compromiso global para crear conciencia sobre los problemas de salud mental en todo el mundo y movilizar esfuerzos en apoyo de la salud mental.
La pandemia de COVID-19 ha agravado la situación de salud mental en la Región, aumentando los nuevos casos de afecciones de salud mental y empeorando las preexistentes. También ha producido interrupciones significativas en los servicios para trastornos mentales, neurológicos y por uso de sustancias. Las poblaciones que históricamente se han enfrentado a una mayor carga de afecciones de salud mental y un acceso reducido al tratamiento se ven afectadas de manera desproporcionada por los impactos de COVID-19 en la salud mental.
En la Región de las Américas, los trastornos mentales, neurológicos y por uso de sustancias (SNM) y el suicidio representan más de un tercio (34%) del total de años vividos con discapacidad, siendo los trastornos depresivos la principal causa de discapacidad. Casi 100.000 personas mueren por suicidio cada año en la Región.