El pasado 24 de abril se cumplieron 100 años de la travesía que unió ambas ciudades montado en dos caballos criollos argentinos por parte del suizo Aimé Tschiffely y Emilio Solanet, nieto del veterinario, que le suministró los caballos relató en el programa Entrando en Órbita detalles de aquella gesta.
Desde la localidad de El Cardal, partido de Ayacucho, Solanet recordó que su abuelo quiso rescatar la raza del caballo criollo porque se veía amenazada por el ingreso de ejemplares europeos ya que en esa época “todo lo que venía de Europa se pensaba que era mejor”.
Rememoró que su abuelo viajó a Río Senguer, Chubut, en el sur del país para traer de las tribus de los pueblos originarios ejemplares de caballos criollos, de aquellos llegaron con los españoles y que sobrevivieron a las condiciones de estas tierras.
“Luego de haberse conocido a través de un tercero mi abuelo le regala dos ejemplares de caballos criollos, Gato y Mancha, con el que Aimé Tschiffely decide iniciar su epopeya” relató Emilio Solanet, en su diálogo con Osvaldo Medina y Silvina Camino.
Repasá aquí la nota completa con Emilio Solanet referida a la hazaña de unir a caballo Buenos Aires con Nueva York:
